Lico ya descansa en casita tras unos días compartiendo hogar con multitud de clientes y amigos de Café LA GALERÍA. Tras ver pasar muchas, muchas, muuuuuchas porciones de deliciosas tartas y conocer a un montón de gente, vuelve al que suele ser su nidito habitualmente.

Tengo que agradecer hasta la saciedad el trato recibido por esta familia de Café La Galería, pues de verdad hacen que te sientas en casa. Porque siempre están apoyando al arte, a cualquiera que llame a sus puertas con ánimo de dar lo mejor de sí mismo. Porque a Lico y a mí nos tratan siempre de una manera muy especial y nos hacen sentir amor y felicidad.

Y cómo no, agradecer la visita de tantos viejos y nuevos amigos. A los de siempre, a los que me dan alas, me empujan, me apoyan y me dan su ayuda y confianza. A los que quieren a este Lico que no dejará nunca de ser un bribón.

Como bien dice la lámina de la viñeta que aparece de fondo «Entraste en mi vida y me robaste el corazón». A mí y a muchos otros. Gracias Lico.

Buenas noches.